SOBRE LAS MUJERES

El desprecio a la mujer y cuanto representa es tan antiguo como actual.

Inmersa en desear comprender el por qué de tanto desprecio, incluso en este siglo XXI, que debería ser ya bandera real de tantas igualdades, coincido con estudiosas del tema en que desde el siglo XV, por ejemplo, la persecución de mujeres a las que tildaron de brujas, fué vital para el desarrollo del capitalismo. La continua expulsión del campesinado de la tierra, la guerra, el saqueo a escala global y la degradación de las mujeres, son condiciones necesarias para la existencia del capitalismo en cualquier época. Todas las tierras comunales se fueron expropiando a través de los cercamientos, estas tierras donde las mujeres se dedicaban activamente a recolectar la huerta, y que se propició que fuese mal visto dicho trabajo ya que no aportaba ningún beneficio a los Poderes existentes. Fueron recluídas en las cuatro paredes de sus hogares. Así comenzó una dependencia económica del hombre (división sexual del trabajo) y la introducción del trabajo asalariado forzoso . Los trabajadores que intentaban ofrecer su trabajo de forma independiente o dejar a sus empleadores eran castigados con la cárcel e incluso con la muerte, en caso de reincidencia. En Inglaterra, por ejemplo, los cercamientos continuaron hasta el siglo XVIII, pero esto dió comienzo a una intensa lucha, donde hubieron numerosos levantamientos acompañados por el debate sobre los beneficios y las desventajas de la privatización de la tierra, un debate que por cierto, continúa en nuestros dias gracias a la arremetida del Banco Mundial contra los últimos bienes comunes del planeta.

Las mujeres a lo largo del tiempo, aprendieron la sabiduría de las hierbas para sanar males, ejercían de comadronas ayudando a las parturientas o sabían como practicar abortos, podían ayudar a sanar a gentes enfermas y fué este saber convertido en poder el que generaba envidia entre los médicos. Seguramente, como indica Victoria Sau, un número importante de estas mujeres sabias, formaba parte de un movimiento social subversivo que fue barrido a fuego con la excusa de la religión. El Poder necesitaba eliminar cualquier obstáculo y las mujeres lo eran ( y lo son). Violación, tortura, asesinato, negación de derechos humanos y civiles son vigentes hoy en muchos lugares del planeta.

La caza de brujas destruyó todo un mundo de prácticas femeninas, relaciones colectivas y sistemas de conocimiento que habían sido la base del poder de las mujeres en la Europa precapitalista, así como la condición necesaria para su resistencia en la lucha contra el feudalismo.

En tiempos de globalización, la caza de brujas continúa hoy como instrumento clave de división en muchos países, como por ejemplo Nigeria y Sudáfrica. Esta caza ha ido acompañada de pérdida de posición social de las mujeres provocada por la expansión del capitalismo y la intensificación de la lucha por los recursos que, en los últimos años, se ha agravado por la imposición de la agenda neoliberal. En esta competencia a vida o muerte por unos recursos cada vez más agotados, muchas mujeres fueron perseguidas ( unas 70 fueron quemadas) en 1990-1994 según el Diario de México. También han habido cazas en Kenya, Nigeria y Camerún durante 1980-1990, en el momento en que se imponía la política de ajuste estructural del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, lo que ha llevado a cercamientos, causando un empobrecimiento de la población sin precedentes.


Para saber más:

- Calibán y la bruja. Mujeres , cuerpo y acumulación originaria, de Silvia Federici.
Editorial Traficantes de Sueños, 2010
- La acumulación a escala mundial: una crítica de la teoría del subdesarrollo, de Samir Amin.
México, S.XXI, 1985
- Brujas, Comadronas y enfermeras: historia de las sanadoras, de Barbara Ehrenreich.
Barcelona, La Sal, 1984
- http://fundacionethernithas.blogspot.com/2010/09/las-mujeres-sanadoras-y-la-caza-
de.html